TOROS AREVALENSES

            En mi pueblo los toros corren mucho. En la plaza de toros hay mucha gente, y esperan la llegada. Toda la gente entra corriendo para que los toros no les pillen, pero pocos valientes son los que se quedan en el ruedo para animar al público.

          La gente anima a los toreros el día de las corridas. Se pasan muchos nervios porque parece que el toro en cualquier momento le puede clavar un cuerno al valiente que tiene delante, ¡porque hay que ser muy valiente para ponerse delante del toro!.

Con las vaquillas me divierto mucho, pero los toros me hacen sentir algo diferente: miedo, emoción…. y alegría cuando todo acaba bien y el torero se va contento porque se ha ganado ¡dos orejas y hasta el rabo!.

Siento pena por el toro, pero después al ir a comer está muy rica la caldereta.

                                                                           Mayerly Pascual Bermúdez (9 años)

                                                               C. P. “ La Moraña”